Homenaje a Juan de Herrera, arquitecto del rey
1578
Jacopo Nizzola da Trezzo (Trezzo, h. 1514 - Madrid, 1589), conocido en España como Jacome da Trezzo o Jacometrezo, fue un escultor, medallista, arquitecto, orfebre y entallador de gemas italiano, que trabajó activamente en Milán, Bruselas y Londres hasta establecerse definitivamente en España hacia 1559. Trabajó en la corte de los Austrias y llegaría a ser consejero artístico y técnico de Felipe II. Esta medalla es un homenaje a su amigo y compañero, Juan de Herrera (1530-1597), arquitecto real y responsable máximo del gran proyecto de El Escorial desde 1572.
En el anverso, aparece el busto de Juan de Herrera hacia la izquierda, con cabello corto ensortijado y barba. Lleva gola y vestidura civil. A su alrededor, la leyenda «IOAN.HERRERA.PHIL.II.REG.HISPP.ARCHITEC» (Juan de Herrera, arquitecto de Felipe II, rey de las Españas). Bajo el busto, la firma del medallista y la fecha «IACTR 1578». Todo ello dentro de gráfila perlada.
En el reverso, hacia a la izquierda, una alegoría de la Arquitectura como matrona romana sedente y sosteniendo en su mano diestra un compás y en la siniestra una escuadra. A sus pies, un reloj de arena, un libro y una esfera armilar. Completa la escena, al fondo, un templete de tipología clásica sobre gradas, probablemente inspirado en la custodia escurialense, esculpida por el propio Trezzo sobre diseño de Herrera. A la izquierda, en primer término, una columna clásica. Bajo el exergo, la divisa «DEO ET OPT PRINC» (A Dios y al príncipe). Todo dentro de gráfila perlada.
En 1579, un año después de la acuñación de esta medalla, Herrera fue nombrado arquitecto y aposentador de Palacio. Con esta medalla, Trezzo pretende otorgar un merecido reconocimiento al que fuera su colega y amigo personal mediante la dignificación de la profesión de arquitecto. La utilización de la iconografía clásica y las leyendas empleadas refuerzan esta reivindicación de la arquitectura como una labor científica e intelectual, propia de las artes liberales. El estudio del inventario de bienes de Juan de Herrera refleja la existencia de una pequeña colección de medallas y monedas antiguas, entre las cuales se encontraría esta significativa medalla.