Majando mieses en la era
1700-1725
En una sociedad agraria como la del siglo XVIII, las escenas de la vida campesina resultaban fácilmente reconocibles para todos los estamentos, incluso para las personas de la realeza. Entre esas labores estacionales del campo, Michel-Ange Houasse (1680-1730) representa el majado tras la siega de agosto. Este corresponde a tres hombres con mayales golpeando con fuerza los cereales en la era para separar el grano de la paja, mientras uno más próximo al espectador quiere levantar una de las gavillas y, al fondo, se amontona el grano con ayuda de una pala. Amenizan la composición otras figuras que no participan en las tareas propiamente agrícolas: la pareja que en el centro atiende la olla al fuego y, en primer término, a la izquierda, las mujeres recostadas, el hombre que descansa junto a ellas o los niños jugando despreocupadamente, ajenos a toda responsabilidad.
El artista francés supo reflejar con maestría la vida campesina en un amplio conjunto de cuadros de pequeño formato, muchos de ellos expuestos en el Palacio Real de La Granja de San Ildefonso, para donde fueron pintados. Muchas de estas representaciones parecen ajenas a la realidad española, aunque ciertas tareas y diversiones eran comunes en la Europa del momento. En el formidable conjunto de pinturas de Houasse en las colecciones reales de Patrimonio Nacional, se ven también paisajes de los Reales Sitios, vistas al parecer italianas, escenas religiosas, personajes curiosos y algún retrato.
Marcado con un aspa blanca en el ángulo inferior derecho, correspondiente a la cruz de Borgoña o de san Andrés, tiene pintado en el ángulo izquierdo un «509», asimismo en blanco. Esa cifra pertenece a la numeración de las pinturas de Felipe V en el inventario del Palacio Real de La Granja de San Ildefonso de 1746, en donde viene descrita de la siguiente manera: «Otro Pays original en Lienzo, de mano del dho Hobàise, que representa vnos Labradores majando unas Mieses. Tiene tres quartas de alto; vna vara de ancho. y Marcos dorados con Targetas á las Esquinas». Mantiene el cuadro la enmarcación descrita, con decoración de talla vegetal en los cuatro ángulos. Ese modelo resulta bastante común en las colecciones pictóricas del Real Sitio de San Ildefonso y vendría a dar unidad a las decoraciones interiores del Palacio Real. Su realización permitía hacer los largueros y travesaños por un lado y la talla de las «tarjetas» por otro, ya que van clavadas en los cuatro ángulos.