Mesa
1800-1825
El origen del florentino «Opificio delle Pietre Dure» se sitúa en 1588, debiéndose a Fernando I de Medici, tercer gran duque de Toscana, quien quiso implementar en Florencia el arte de la taracea de piedras duras o «commesso». A pesar de la creación de manufacturas similares en los siglos posteriores, como el «Real Laboratorio delle Pietre Dure» de Nápoles o la Real Fábrica de Mosaicos y Piedras Duras de Madrid, fundadas respectivamente por Carlos III en 1737 y 1759, el Opificio mantuvo un prestigio que lo hizo proveedor de ricas obras pétreas a lo largo de toda su historia.
La técnica del «commesso», empleada tanto en elementos arquitectónicos como en bienes muebles, brilló especialmente por su empleo en tableros de mesas. Se han establecido varias diferencias entre las obras de manufactura florentina y las de manufactura romana, destacando principalmente la ausencia común de elementos geométricos en las primeras, más abundantes en las piezas provenientes de la capital del Lacio, en favor de decoraciones de carácter figurativo.
De Florencia procede el tablero de esta mesa, de cuya historia informa el especialista Alvar González-Palacios. La pieza se inspira en otro tablero, hoy en el Hermitage, diseñado por Giuseppe Zocchi y ejecutado en 1766 para Pietro Leopoldo de Habsburgo Lorena, quien fue gran duque de Toscana entre 1765 y 1790. Igualmente, se plantea Alvar González si el paso de la obra a la Corona española tuvo lugar a través de la herencia que María Luisa de Borbón, reina consorte de Etruria, dejó a su hermano Fernando VII tras fallecer en 1824, momento hasta el que el tablero de esta mesa la habría acompañado en su vida errante por la península itálica desde que partiese de Florencia en 1807.
Por su parte, el soporte de madera tallada y dorada fue probablemente realizado en España. De estilo Carlos IV, muestra diferentes elementos decorativos de carácter vegetal que crean un rico contraste con la estructura de caoba. En el faldón aparecen, entrelazadas, las letras M y A, sin que sepamos con certeza a quién pudieron corresponder estas iniciales.