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La aparición de Cristo a María Magdalena

1496-1504

Forma parte del «Políptico de Isabel la Católica», junto a otras escenas de la vida de Cristo. Esta representación del Señor, apareciéndose vestido de hortelano a María Magdalena tras haber resucitado (Juan 20, 17; y Marcos 16, 9), es una de las más delicadas y poéticas piezas de este políptico, a lo que contribuye el armonioso empleo de la luz y de los colores claros y a la elección de un paraje tan encantador para su desarrollo. El diálogo tan silencioso que mantienen los dos protagonistas queda plasmado con el simple gesto de la mano de Cristo, que pretende indicar las palabras que le dirigió a la Magdalena -«Noli me tangere» («No me toques»)-, que son recibidas por la santa con una expresión de suave melancolía en su rostro. El cerramiento del huerto, en el que se encuentran los dos personajes, es un muro de piedra con dos portadas, una en arco de medio punto y con aspecto ruinoso, y otra rematada en torre almenada, mientras que el recinto escenográfico tiene repartidos tres bellos árboles, hallándose el más cercano a la tapia con hojas de un dorado otoñal, a juego con los otros ejemplares del fondo, que se vislumbran sobre un entorno de suaves montañas rocosas.

Con su acostumbrada túnica azul oscura, la figura tan sobria y erguida de Cristo, apenas apoyada sobre la pala de madera que lleva en su diestra, contrasta con el encanto femenino de la Magdalena. El atractivo aspecto de la santa se ve realzado por su atuendo de rico colorido, con una saya marrón clara, mangas verdes y manto de un rosa intenso, y por el juego vaporoso de su velo, que recoge su cabellera y le cruza el busto para caer suavemente sobre el hombro izquierdo. El pintor se ha esmerado en la factura meticulosa del miniaturista a la hora de integrar a la perfección el nervioso drapeado de los numerosos pliegues que conforman su figura, que le aportan encanto y belleza.

Clasificación genérica

Pintura religiosa; Pintura de caballete

Tipo de objeto

Cuadro

Autoría

Flandes, Juan de

Título

La aparición de Cristo a María Magdalena

Título del conjunto o serie

Políptico de Isabel la Católica

Época / Contexto cultural

Reinado de Isabel I de Castilla; Tardogótico español; Tardogótico flamenco; Escuela flamenca

Lugar de producción

España

Datación

1496-1504

Materia

Madera

Soporte

Tabla

Técnica

Pintura al óleo

Dimensiones

Fondo enmarcado: (Altura: 26 centímetros; Anchura: 20,8 centímetros)

Inventario

10002028

Créditos

Texto: Carmen García-Frías Checa

Descúbrela en la Planta -1

Autores y coleccionistas

Flandes, Juan de
El autor

Flandes, Juan de

(¿Bélgica?, 1465 - Palencia, 1519)

Juan de Flandes (c. 1465–Palencia, España, 1519) fue un pintor de origen flamenco, considerado como uno de los más importantes representantes del Renacimiento en España.

Los únicos datos seguros que se conocen sobre su biografía corresponden a su actividad en Castilla, entre 1496, en que entró al servicio de Isabel la Católica como pintor de Corte, y 1519 cuando murió en Palencia.

Pese a que se ignora la edad que tenía al llegar en 1496 a tierras castellanas, cabe suponer que tuviera unos treinta años —mínimo venticinco—, por lo que debió de nacer hacia 1465, o quizá un año o dos después. Aunque, a partir del apellido con el que se le conocía en Castilla, cabría pensar que nació...

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Isabel I de Castilla
Monarca

Isabel I de Castilla

(Madrigal de las Altas Torres (Ávila), 1451 - Medina del Campo (Valladolid), 1504)

Hija del Rey Juan II de Castilla (1405-1454) y de su segunda esposa, Isabel de Portugal (¿1428?-1496), la futura Isabel La Católica apenas llegó a conocer a su padre, fallecido en julio de 1454.

Sus primeros años de vida transcurrieron en Arévalo (Ávila), en compañía de su madre y de su hermano el Infante Alfonso (1453-1468). La instrucción de la entonces Infanta Isabel estuvo a cargo de Fray Martín de Córdoba, su preceptor, bajo la supervisión de Gonzalo Chacón, comendador de Montiel. Existen pocos datos acerca de la educación que pudo recibir durante su infancia, si bien se sabe que el latín, lengua de la cultura y de la diplomacia en la Europa de finales del siglo XV, lo aprendió...

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La obra en contexto

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